viernes, 2 de diciembre de 2011

CARTA DE AMOR EN UNA BOTELLA


Está escrito en la Novela Simara Súper Star.


    “Amada mía, los avatares de la guerra me llamaron y no pude despedirme de ti, tengo el presentimiento que no volveremos a vernos, cuanto lo siento, la tristeza me ha hecho prisionero, soy su cautivo y en mi pensamiento solo está tu presencia, deseándote, proyectando tu figura y queriéndote decir ahora lo que no te dije antes.”

    “Amor mío, ahora estamos en la terrible gran guerra que destruye al mundo, estoy destacado en un acorazado esférico que se hunde y desde aquí lanzo esta botella con mi carta de amor para ti, tal vez no la leas nunca, porque el puño cerrado del destino jamás se abre, ni deja leer la lectura de las líneas de su misteriosa mano.”

     ¡Oh amor, no puedo sacarte de mi mente, déjame imaginarte y sentirte, quiero mirar tus ojos encendidos y absorber tu luz como que fueras el resplandor de una eterna primavera, me imagino tus cabellos como una flor de pétalos inquietos, sacudidos en el enigma de las horas que se van y sentir tus tibios labios señoreando la mágica potestad de mis sentidos!

     ¡Oh Sara, déjame trajinar los insondables senderos donde yace la belleza y nace el mágico encanto que opaca y desvanece la tragedia de las horas tristes de la guerra!

     “Amor mío, quisiera conocer el lenguaje de las estrellas que dictaminan los destinos y derraman su luz sobre nosotros, para saber como estás, que tan grande es nuestro amor, siento caer las gotas del mar que me salpican, e imagino mis labios en tus poros brillando en la oscuridad como luciérnagas perdidas en tu poderosa personalidad.”

     ¡Oh Sara, como te extraño, como amo este mágico elíxir encantado que nos ha unido y la simbiosis que generó esa fuente de luz que ambos emitimos, con esa química invisible que nos trasladó a destinos superiores, pero tú no estás!

     ¡Oh amor, oigo el susurro del viento del mar y te siento a ti, penetrando mi alma y dilatando fulgores encendidos que me elevan, cuanto poder tiene tu amor, cuando estaba contigo me sentía  poseído por un sortilegio que llenaba mi vida de enigmas, porque eras tan “TU”, que parecías irreal!

     ¡Oh amor mío, todos los sueños bellos a tu lado fueron posible, pero ahora no estás, contigo nunca temí a la tempestad ni al trueno, me gustaba escuchar el timbre de tu voz y ver en la penumbra tu mágica figura, señoreando los espacios encantados de mi alma!

                                         Eternamente tuyo:     ANÍBAL.



juanbautistaescritor@gmail.com    El mago de las letras.

viernes, 17 de junio de 2011

HUELLAS EN LA CASA BLANCA U.S.A.

Ficción.

En los pasillos de la Casa Blanca, tal vez haya quedado algún efecto místico, invisible, de algunos de los gobernantes de turno que ahí vivieron y grabaron sus huellas en el piso con el calor de sus pies.

Porque una personalidad cuando ha sido señalada por el destino para cumplir una misión hermosa, genera temperaturas altas al desplazarse y esta podría plasmar una pisada enigmática y magnética, que se pronuncie con perpetuidad y aun si el piso fuese removido, quedarían estampadas ahí, porque la energía no se pierde y cuando alguien tiene el brillo de la historia, posee un fluido etéreo y todo lo que toque ese personaje, queda cubierto con su esencia y el flujo misterioso de la eternidad.

La grandeza de un ser humano no la determina nadie, solo sus obras lo consagran y quizás nunca tuvo consciente que tan importante era, hasta que la historia con su dedo divino lo señaló.

A la Casa Blanca llegó un hombre humilde e infinitamente grande, me lo imagino en aquel tiempo, atravesando sus pasillos y corredores, taciturno, melancólico, con el rostro triste y silencioso, no obstante su personalidad tenía el toque magnético de las celebridades y el halo misterioso de la Providencia, el era ABRAHAM LINCOLN, el Padre de la Libertad de los Esclavos de los Estados Unidos.

Por: juanbautistaescritor@gmail.com

juanbautistaescritor@hotmail.com

El Mago de las Letras.

sábado, 9 de abril de 2011

JAPÓN Y EL ARQUERO DEL DESTINO


La luz de un nuevo día llegó, nubes negras cubrieron la belleza, los cerezos se marchitaron esperando talvez lo inevitable, las plantas y las flores en su esencia pudieron captar los sucesos mucho antes del temblor, llegó el derrumbe y una realidad hermosa se desvaneció, luego la flauta japonesa se detuvo y la melodía que fluía atravesando los inmensos puentes, campos y montañas quedó en silencio, ahogada por la fuerza incontenible de un Tsunami, el paisaje fue cubierto por las aguas; por que el Arquero del Destino, lanzó una flecha flamígera y quedó clavada allá en el horizonte.

Japón quedó herido, no obstante este magnífico País, siempre se ha crecido en la adversidad, su grandeza ha modelado su espíritu, su valor y su alta inteligencia lo salvará.

Japón no duerme, hasta que la noche oscura y tenebrosa pase y se convierta en día, harán girar la Rueda de la Fortuna y el alfarero seguirá modelando la arcilla de la vida para fabricar la Historia.

Terminarán las ánforas que irán al horno y todo será como antes fué, por que cada pueblo, cada País tiene el destino en su mente y cada cual cosecha lo que siembra; Japón ha sembrado bastante, ha sembrado bien y tendrá buena cosecha.

Que la Inteligencia Divina bendiga a Japón.

Por: juanbautistaescritor@gmail.com

juanbautistaescritor@hotmail.com

El Mago de las Letras.

sábado, 15 de enero de 2011

AL OTRO LADO DEL ESPEJO



El drama de una actriz.

Caminó algunos pasos hasta llegar frente al espejo, que servía de tocador en su habitación, se miró con recelo y enfado, pues la imagen de mujer anciana que reflejaba el cristal no era de su agrado, ella había sido una bella mujer y solicitada actriz, con toda la celebridad y la fama que quiso tener, fue aplaudida, venerada y bien pagada, toda una Diva; ella era el blanco de las envidias de quienes no pudieron llegar donde ella llegó.

Fue una actriz de inmenso prestigio y ahora el espejo le hacía una mala jugada, rechazaba verse, no quería aceptar sus carnes caídas, convertidas en surcos, en un rostro partido y agobiado por la avalancha del bisturí.

Mirándose de soslayo en el cristal, sus temblorosos labios modulan una frase amarga y llena de decepción, realmente soy una vieja, pero mi mente no lo acepta.

No quiero ser una anciana, mi bello cuerpo donde está? Se disipó mi gloria y mi fama se perdió en el tiempo y donde fue a parar mi radiante juventud?

¡Oh cuanta confusión invade mi alma, ya no tengo admiradores que me inviten a salir o me envíen flores.

El amor huye de mi, se ha ido, donde estás amor, donde estás, sal de las sombras quiero verte, o es que ya no existe para mí?

Ya nadie me conoce por las calles, solo la soledad anda conmigo, ya son pocos los que me saludan porqué? Ahora no se asoman para verme pasar, soy una vieja, pero no lo acepto, ni lo aceptaré nunca, mis aplausos no los oigo, todo se va cuando la vejez llega. No me quise casar ni tener hijos, pero no quiero mi condición de anciana no quiero.

El interior de su deslucida habitación aún refleja en las fotografías pasadas glorias retratos de amantes y placas de reconocimientos y trofeos de estudios cinematográficos, avalando un esplendor ya pasado.

Después de ese desgarrador monólogo y posesionada en la soledad y el silencio, con amargura se queda estática contemplando su imagen taciturna, mira su rostro deshecho por los abusos de estiramientos quirúrgicos, con las ojeras hinchadas, bañadas de lágrimas y alucinada por la incertidumbre, de su boca sale un verbo altanero y desafiante: ¿Dónde está mi fama, por que me la quitaron, soy la mejor actriz soy una Diva, por que no me contratan? Y con una mueca de locura solloza y recuesta sus dos puños cerrados al espejo, así permanece un largo rato y cuando abre los ojos ve una estampa, una figura que es ella misma, pero no la vieja de 75 años, parece tener 31 años de edad, la época de su más brillante esplendor y gloria como artista de cine.

La anciana se asombra y se asusta, luego la imagen aparecida en el espejo estira la mano fuera del cristal y le dice: “Ven Marlene, no temas yo soy tu misma persona, vamos a vivir de nuevo; la hala hacía adentro, se desvanece la anciana y aparece de nuevo la bella actriz con toda su juventud y brillo, en otra ciudad y en otro tiempo.

Nota: Si hay algún estudio cinematográfico interesado en este argumento lo estoy terminando. Contáctenme.

Por: juanbautistaescritor@gmail.com

El Mago de las Letras.-